El fútbol es una pasión que va más allá de lo deportivo, y, gane o pierda, los aficionados acudimos en masa a los campos cada domingo para animar al equipo de nuestros amores. Los seguidores del Necaxa están acostumbrados a que el club les dé sobresaltos, ascensos, descensos, alegrías, títulos, decepciones... y por eso es uno de los equipos cuya hinchada es más fiel año tras año, y que llenan el campo de la Victoria para ver al "Campeonísimo" en sus partidos del campeonato doméstico y de las copas internacionales.
Un club que es una leyenda
Como el ave fénix resurgió de sus cenizas, el Necaxa está acostumbrado a caer y volver a levantarse. No toda su historia es la historia de un éxito, pero sí de una pasión, y al conseguir entradas para el Necaxa se está comprando una entrada a un espectáculo donde el sentimiento colectivo está por encima del individual. Cuenta en sus vitrinas con más de una decena de títulos, entre ligas y copas mexicanas, y con dos copas internacionales, además de haber participado en el mundialito de clubes contra los mejores equipos de cada uno de los continentes. El hecho de que haya estado a punto de desaparecer en varias ocasiones solo ha conseguido aumentar su leyenda, y hacer que los aficionados lleven al equipo en volandas en las victorias y en las derrotas por igual.
La pasión de un estadio caliente
Una vez con las entradas para el Necaxa en la mano, lo mejor es llegar al estadio con un par de horas de antelación. La experiencia de ver ne vivo un partido de "Los Electricistas" comienza en los aledaños del campo de la Victoria, con la afición esperando recibir al equipo, y entrando a las gradas a una hora temprana para comenzar con los cánticos y los gritos de ánimo, que empiezan cuando el equipo sale a calentar, y no terminan hasta varios minutos después de que el árbitro haya decretado el final del partido. Entre los logros que cuenta el Necaxa, están, además de los títulos colectivos, tener el honor de haber contado con el máximo goleador de la competición doméstica en más de diez ocasiones, además de haber nutrido a la selección nacional de algunos de sus más ilustres jugadores, destacados en los últimos mundiales en los que la selección azteca ha podido participar. Su clásica camiseta de rayas horizontales blancas y rojas ha tenido muy pocos cambios a lo largo de los años, y en las más de 80 temporadas que ha militado en la primera división mexicana, sus aficionados la han llevado con orgullo en todo momento. Consigue tus entradas con StubHub.
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